viernes, 7 de mayo de 2010

nº 18


Le he dicho al librero que no me gusto, que soy un rollo. A veces parezco letrado y parezco numerado a veces. Digo palabrotas y soy un ñoño en el mismo párrafo. Perdono la vida a algunos y me muestro comprensivo indiscriminadamente. No se me ve y creo que se me ve plano como la superficie lisa de una gran circunferencia. Le he dicho al librero que estoy harto y me ha soltado una hostia ridícula tras la que ha ordenado, serio como un capitán, que fuera a la oficina: tienes trabajo, me ha dicho mientras se ahogaba de humo con las atómicas partículas alocadas que venían siendo mi cara y que buscaban, desorientadas, la manera de volver a su formación de esta mañana: me había levantado sonriente. Lo del librero ha sido, por tanto, borrarme la sonrisa de la cara, o la cara de la sonrisa, como le pasara al gato de ¿Chesire?. Hay que ver qué gato más absurdo.

Así que me he dirigido al lugar donde me esperaba el trabajo: la habitual torre de libros, más bien pequeña. Me he sentado y he esperado a que llegara hasta el resto de mi yo lo que ha de considerarse testa, dispersa y confundida con el aire después del feo sopapo del tendero. Cuando el humo que habría de corresponder con mi cara se ha concretado en su lugar correspondiente he recorrido la pila de lomos con la vista. Siete títulos en bolsillo. Cinco novedades en divulgación y dos en ficción. Esto no es una torre, es un bulto. Como mucho.



- Bolsillo -

Veamos. Tres títulos en Maxi Tusquets. LA DESPEDIDA, de Milan Kundera. Trama a partir de un contexto que sirve, habitualmente, para alejarse de las tramas y otras complicaciones: ocho personas en un balneario. Traduce Fernando Valenzuela. Original de 1973, en España sólo se había publicado en formato grande. Doscientas cuarenta páginas y ocho con noventa y cinco euritos. Original de 1980 es la obra UNA PRINCESA EN BERLÍN, del neoyorquino Arthur R.G. Solmssen (traduce Raúl Acuña): en 1922 el Berlín deprimido y confuso que sigue, en buena medida, las consignas de un tal Adolf Hitler acoge una historia de amor e intriga que hace presagiar los horrores que tan tristemente famoso hicieron al siglo XX europeo y alemán. El tercero de los libritos negros que se dejaban ver entre la organizada montonera de esta mañana es LA PIRÁMIDE, de Henning Mankell, al que siempre recomiendo y que nunca he leído. No sé por qué será. De momento no haré preguntas ni exigencias al de la tienda. Aún siento un picor como de colleja. Por cierto, el texto de la del Mankell es de Carmen Montes Cano.

Dos títulos en Austral. LAS AVENTURAS DEL VALEROSO SOLDADO SCHWEJK, del checo Jaroslav Hasek (traducción de Alfonsina Janés). Un libro de humor que es clásico antibelicista, una de las obras más conocidas de aquel país (junto con las del Kundera, claro). Seiscientas páginas. Diez con noventa y cinco. Y en formato de estuche (envasado), con dos volúmenes y (a peso) unas mil quinientas páginas, sujeto entre las manos EL HOMBRE SIN ATRIBUTOS, de Robert Musil, arropadito de comentarios empalagosos y que quizá no sean exagerados. Nunca se sabe. Casi veintisiete euritos. Hay algo que no entiendo.


De la serie Compactos, de Anagrama, me he decidido por reseñar CIELO NOCTURNO, de Soledad Puértolas. Doscientas cuarenta páginas. Nueve euros. Ejercicio, ficticio, que rememora momentos de la adolescencia y que sirve para reflexionar sobre los conflictos personales que conciencia y norma exterior mantienen durante el aprendizaje: los años vividos. Nos cuenta la Puértolas: Camino del colegio, al pasar por delante del Almacén Moraleda, me detenía para asomarme a la oscuridad y tratar de distinguir algo, mesas, mostradores, estanterías, sillas. Sobre las ventanas a ras de suelo aún se podía leer el rótulo desgastado de la tienda, ya clausurada. Las letras habían sido doradas, el fondo había sido negro. Almacén Moraleda. Pronunciaba en voz baja las palabras como si fueran un conjuro, pero no ocurría ninguna transformación. Me asomaba a las ventanas polvorientas del almacén y sólo veía oscuridad.



- Ensayo y divulgación -

En Paidós (contextos) un librito llamado ESCRITOS INÉDITOS que recoge textos del filósofo y periodista André Gorz (1923 - 2007). Por lo que se nos cuenta en uno de los prólogos que, a cargo de Christophe Fourel, nos presentan la obrita ésta es, además de una colección de inéditos, una introducción al pensamiento de uno de los intelectuales más influyentes de la segunda mitad del pasado siglo. Se trata de una lectura que viene a cuento esn estos tiempos de crisis financiera, laboral y ecológica que cabría expresar como síntomas de un sistema, el capitalista, que viene agotándose. La salida del capitalismo, como final de un proceso, es la tesis predictiva de este filósofo y la propuesta sobre la manera de hacerlo el otro meollo de la cuestión. Fourel, el editor, nos lo presenta como posible guía de la izquierda europea y también como obra susceptible de una crítica cada vez más necesaria en nuestros autocomplacientes días de hoy. Ciento cuarenta páginas. Veintidos euros. Traducción de Núria Petit Fonserè.
En la misma editorial DIARIO DE MI VIAJE A CHINA, de Roland Barthes, crítico literario, semiólogo y escritor francés (1915-1980). Se trata de tres cuadernis, inéditos como tales, que recogen las impresiones del viaje que realizara en 1974 a China, un viaje organizado que realizara junto al filósofo François Wahl y otros acompañantes. A pesar de las condiciones excesivamente reglamentarias del viaje las notas son interesantes porque proporcionan una visión original, más interesadas en las personas que lo que expuesto a los ojos del turista se podía (y aún debía) encontrar este en el circuito oficial, seguro. Todo según la introducción de Anne Herschberg. Doscientas cuarenta y dos páginas. Diecinueve euros. Traduce Núria Petit Fonserè.


En Anagrama dos libros que me tienen muy interesado. Uno: LA METAMORFOSIS DE LA LECTURA, de Román Gubern (Barcelona, 1934). Un ensayo sobre la evolución de la escritura, o las distintas maneras de fijar el lenguaje y el pensamiento, desde la piedra y el papiro hasta las nuevas tecnologías, pasando por el papel. Se trata de una lectura apetitosa de la que espera dar mejor cuenta en los próximos días. Ciento cuarenta páginas. Catorce euros.
Y el otro: BIBLIOTECAS LLENAS DE FANTASMAS, de Jacques Bonnet. Tratado, según nos cuentan en la contraportada, sobre el arte de vivir con demasiados libros. He podido leer la nota introductora que cuenta la solicitud que Fernando Pessoa hiciera para el puesto de conservador-bibliotecario en el Museo Condes de Castro Guimaras, en la población portuguesa de Cascais, y que fuera rechazada, en 1932. Es una anécdota de entre las muchas que se nos prometen en este libro de fantasmas que pululan por las bibliotecas de cada cual, personales y vivas como sus ficticios habitantes. No digan que no tiene buena pinta. Ciento cuarenta páginas. Catorce euros. Traduce David Stacey.

Para cerrar este sección divulgativa reseño, ligeramente, el libro que estoy leyendo ahora: TRAICIONES DE LA MEMORIA, del colombiano Héctor Abad Faciolince. Una investigación sobre la autoría de un poema: EL OLVIDO QUE SEREMOS, que el autor encontrara en el bolsillo de su padre asesinado. Como comprenderán con este inicio el libro trasciende la crónica o la supera. Ya contaré con más detalles. Tres doy de momento: Alfaguara, doscientas setenta páginas y diecinueve con cincuenta euros. Por si interesa.





- Ficción -


Ya dije que sólo dos libros. También en Alfaguara CUENTOS REUNIDOS, de Francis Scott Fitzgerald. Tremendo tomo de más de novecientas páginas que pertenece a la colección que esta editorial viene formando desde Faulkner y que ya ha pasado por Onetti, NaboKov y Cortázar. La presenta edición está a cargo de Mathew J. Brucoli. Traduce Justo Navarro.



Otro volumen de cuentos: Anagrama ha reunido en su serie Otra Vuelta de Tuerca aquellos que forman LLAMADAS TELEFÓNICAS, PUTAS ASESINAS y EL GAUCHO INSUFRIBLE, de Roberto Bolaño. Volumen extenso que quizá merezca la pena tener aunque aún no he echado la cuenta. Quinientas cincuenta páginas. Veinticuatro euritos.

5 comentarios:

  1. Hola:

    De lo que comentas he leído La despedida de Kundera. Hace años, leí todas las novelas de Kundera, me gustaba mucho. Este libro no es de los mejores, pero mantiene el nivel.

    Las aventuras del valeroso soldado... también lo leí. está bien, pero a veces abusa de una especie de humor medieval con gente que no para de comer y cosas así... auqnue hay también págins muy buenas.

    Y por supuesto me encantan los cuentos de Bolaño. Se conoce más al Bolaño novelista, pero a mí el cuentista me parece impresionante. Ese libro de cuentos es un gran libro.

    Y como asignatura pendiente tengo el de Musil. A ver si un verano de estos me pongo con él.

    Saludos

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  2. Hola, David, tendré en cuenta, como siempre, tu criterio. Siento no poder parlar contigo sobre estos títulos que comentas.
    Tu lista de lecturas debe de ser inconmensurable.

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  3. A mi me apetecería el de Cielo Nocturno, a lo mejor lo cuelo en mi lista de pendientes.
    Me encantan las refelxiones iniciales que preceden a las reseñas amigo Peri,
    un saludo

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  4. Lope, me quedo con Soledad Puértolas, de la que aún no he leído nada, y con Jacques Bonnet, que parece haber escrito sobre un tema curioso e interesante para los que luchamos contra la física y el espacio finito por intentar colocar libros donde no caben.
    Saluda al librero.
    Mejor no lo saludes. Mis saludos, sólo para ti.

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  5. Hola, Djlin, gracias por pasarte por aquí una vez más. Eres muy amable con tus comentarios.

    Arrecogiendo: cuando me lleve la próxima galleta del librero (al que preveo armado) me acordaré de ti. Y sólo de ti.

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Comentarios.